Gubidxa Guerrero
El 11 de febrero de 1979 triunfó una Revolución en el Tercer Mundo, hoy llamado Sur Global.
Allá en Asia Occidental, los persas, musulmanes mayoritariamente, derrocaron al Sha y al gobierno que le había sucedido, para instaurar una República Islámica en Irán, también conocida como Persia.
Veinte años después de que en Cuba triunfará una Revolución popular liderada por Fidel Castro, en Irán millones de personas propiciaron el triunfo de una Revolución encabezada por el Ayatola Ruhollah Jomeini.
La Revolución Iraní, al igual que la Revolución Cubana, es antimperialista. Ambas han hecho lo posible por quitarse la tutela estadounidense. Si bien las dos se consideran revoluciones populares en beneficio de las mayorias y con un sentido radical de justicia social, la Revolución de Irán se definió Islámica, religiosa, a diferencia de la de Cuba que se volvió Comunista.
Hace 45 años el pueblo persa decidió cambiar de sistema político. Bajo el liderazgo del Guía Supremo de la Revolución Islámica, Irán ha pasado pruebas muy difíciles, como la guerra en defensa de la agresión de Sadam Hussein y el ejército iraquí, apoyado por Estados Unidos en los años ochenta.
A pesar de las sanciones económicas que han intentado asfixiarla económicamente, la Revolución Islámica de Irán ha tenido avances asombrosos en ciencia y tecnología. El impulso que la Revolución Islámica da a la educación de sus habitantes es notable. Los avances en su propia carrera espacial o en tecnología nuclear la colocan entre un selecto grupo de países.
La influencia de Fidel Castro y el Che Guevara en la Revolución Islámica de Irán fue relevante, según ha reconocido su actual Líder o Guía Supremo, el Ayatola Seyyed Alí Jameneí. No obstante, la Revolución de 1979 fue hecha para los iraníes, así como la Revolución de 1959 fue hecha para los cubanos.
A 45 años de distancia Irán se encuentra en una posición muy ventajosa. Si hace cuatro décadas estaba en duda su propia supervivencia, hoy hasta el gobierno de Estados Unidos respeta al gobierno iraní.
Los iraníes no son árabes. Son mayoritariamente persas y hablan persa. Su tradición histórica es de, cuando menos 2500 años, cuando Ciro El Grande fundó el Imperio Aqueménida. Pero son musulmanes desde hace más de mil doscientos años; y, en tanto musulmanes, defienden la inviolabilidad de la Mezquita de Al Aqsa en la ciudad de Jerusalén/Al Quds. Asimismo, enarbolan la causa palestina y apoyan a varios grupos de la Resistencia en Gaza y Cisjordania que actualmente combaten contra el ejército israelí. En la guerra de Ucrania, que ya lleva dos años, la República de Irán es una aliada estratégica de la Federación Rusa.
Somos testigos del nacimiento de una nueva potencia global. Persia ha vuelto.
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Texto publicado en Cortamortaja el lunes 12/Feb/2024. Enlace: https://www.cortamortaja.com.mx/opinion/16685-un-triunfo-revolucionario-en-el-sur-global-a-45-anos-enfoque-mundial