A la Sala Regional con sede en Xalapa, Ver. tocará resolver los asuntos del puerto y de Juchitán |
Gubidxa Guerrero
[Texto publicado en Enfoque Diario, el miércoles 4/Dic/2013]
Ayer que dediqué esta columna a Juchitán ―y a la incertidumbre de sus habitantes por saber cómo se hará el cambio de administración― alguien me escribió, con toda la razón del mundo, diciendo que Salina Cruz no se quedaba atrás.
Y es que el asunto electoral en el puerto rebasa al juchiteco en trascendencia. ¿Por qué? Porque los resultados que arrojaron las urnas en julio fueron modificados por el Tribunal Estatal Electoral, arrebatándole la victoria al médico Mariano Vicente, candidato del Partido Nueva Alianza (Panal), para otorgarle la constancia de mayoría a su más cercana competidora Rosa Nidia Villalobos, abanderada del PRI-PVEM.
Luego de que las instancias locales anularan varias casillas en el puerto, con el argumento de que éstas presentaron irregularidades que violaron preceptos democráticos elementales (como no hacer proselitismo el día de la elección), un sector de la ciudadanía xhunca salió a las calles para exigir pacíficamente el respeto al voto.
No hubo incendios ni bloqueos; tampoco se agredió físicamente a nadie, ni hubo toma violenta de ningún edificio. Los habitantes descontentos con el fallo del tribunal caminaron por aceras y llenaron algunas plazas. Sin embargo, su clamor no fue escuchado, por lo que no termina de definirse la situación.
El asunto es, aparentemente, jurídico, pero todos sabemos que los encargados de aplicar las leyes a veces requieren de manifestaciones multitudinarias que les sirvan como señal de que hay descontento genuino.
Tocará a los magistrados que se encuentran en Xalapa, Veracruz, dirimir este asunto. Existe la posibilidad real de que el triunfo sea devuelto a Mariano Vicente, así como puede que se revoque la victoria de Saúl Vicente, en Juchitán.
Es curioso ―y preocupante a la vez― que las elecciones de las dos poblaciones más importantes del Istmo vayan a definirse en tribunales, a unos cuantos días de que se dé el relevo gubernamental.
Ayer también, alguien preguntó: ¿y si los jueces no se pronuncian? ¿Qué pasará si se quedan callados con respecto este trascendental tema para el futuro istmeño? En ese caso los resultados quedarían como hasta ahora, validando tácitamente la asunción del PRI en Salina Cruz, así como de la COCEI en Juchitán.
Ojalá no sea necesario y que, por el bien de todos, el tribunal dé certeza a los electores, definiendo con claridad a quiénes deba corresponder la victoria y, por tanto, el derecho de gastar los multimillonarios recursos municipales.