La relación de fuerzas entre el Estado de Israel y Líbano cambió desde mediados de 2006, cuando Hezbolá propinó una terrible humillación a uno de los ejércitos más poderosos del planeta. Desde entonces hay una tensa calma entre Israel y la Resistencia (brazo armado de Hezbolá).
De vez en cuando aviones o drones israelíes violan los cielos libaneses en tareas preventivas. Pero hace algunos días Israel bombardeó una casa en Siria donde se albergaban jóvenes de Hezbolá que combaten a las organizaciones terroristas Al Qaeda y Estado Islámico (también llamado ISIS y Daesh).
Hasan Nasralá, líder de Hezbolá, prometió una respuesta clara y contundente "desde el Líbano" contra las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI). Responsabilizó directamente a Benjamín Netanyahu por "manchar de sangre cada período electoral" israelí. Es sabido que algunos políticos del mundo usan la estrategia de unificar a la opinión pública de sus países mediante conflictos armados. Uno de los casos más vergonzosos fue el de George W. Bush, ex Presidente de los Estados Unidos de América.