Intromisiones de José Luis García Henestroza

Gubidxa Guerrero 

[Texto publicado en Enfoque Diario, el viernes 28/Mar/2014] 

Ni una llamada para saber cómo habían regresado las cachimbeñas que se fueron a la India; ni una sola muestra de interés en el proyecto de formación de mujeres rurales como ingenieras solares en el Barefoot College; ni un solo acercamiento para ofrecerse a colaborar con el programa de electrificación de la isla de Cachimbo. Pero a 200 metros de que las "abuelas solares" llegaran a la comunidad que las vio partir cinco meses antes ―luego de un recorrido de más de 15 mil kilómetros―, el presidente municipal de Ixhuatán, José Luis García Henestroza, acercó la lancha en que venía a la de ellas, pretendiendo ser recibido como héroe por la población. Quien no movió un solo dedo por este hermoso y noble proyecto, quería capitalizarlo de la manera más cínica. Afortunadamente no logró su propósito. El día era de Norma, Rosa, María y Olga ―mujeres admirables que dejaron todo para ir en busca de conocimiento para mejorar su comunidad―, no de un político oportunista.

El susodicho ―alcalde de San Francisco Ixhuatán― obtuvo la candidatura a la presidencia municipal de dicha población debido, en parte, a la intervención de su hermano Gerardo García Henestroza, ex presidente municipal panista del puerto de Salina Cruz. Tomó posesión apenas hace tres meses, pero ya muestra peligrosos signos de autoritarismo.

El proyecto del Barefoot College (Universidad Pies Descalzos) es de índole comunitario. Desde el comienzo ha estado desligado de cualquier partido político. Bunker Roy, su fundador, acudió directamente a Cachimbo, sin pasar a la cabecera municipal, debido a que la pescadería tiene estatus de agencia, y como tal puede decidir por sí mismo asuntos concernientes a su bienestar.

El Comité Melendre, organización que ejecuta el proyecto, jamás encontró oposición de ninguna autoridad municipal, estatal o federal. Los funcionarios entendieron que este proyecto de electrificación de un pueblo mediante equipos solares, es una iniciativa no gubernamental. Además, en junio las campañas electorales estaban en auge, por lo que llegar con un representante de cualquiera de los tres niveles de gobierno podría prestarse a malinterpretaciones.

En lugar de sumar esfuerzos, el presidente municipal de Ixhuatán, pretende dividir a la población. Ha dicho que él “está gestionando 200 paneles solares”, con lo que intenta confundir a la opinión pública; pues no ha dicho ante qué instancia está realizando dichas gestiones ni ha mostrado ninguna prueba de lo anterior. 

Ojalá la ciudadanía se mantenga alerta ante esta grave intromisión que amenaza con detener uno de los proyectos más alentadores que se ha dado en la región istmeña. Cuatro excepcionales mujeres de Cachimbo se fueron a estudiar a la República India para mejorar su pueblo; y por culpa de José Luis García Henestroza, presidente municipal de Ixhuatán, se corre el riesgo de dar al traste con todo.

¿Hasta cuándo entenderán los políticos que deben respetar la labor de las organizaciones no gubernamentales? ¿Cuándo tendrán la humildad suficiente para hacerse a un lado en caso de no querer colaborar? Todavía existe la esperanza de que José Luis García Henestroza ayude al pueblo de Cachimbo a techar la clínica destrozada por el huracán Bárbara; a gestionar la introducción de agua potable o el drenaje. Hay muchas áreas donde la autoridad municipal sería de mucha ayuda. ¿Por qué quiere interferir en un proyecto al que es ajeno? Dice el dicho: mucho ayuda el que no estorba.

Gabino ante el avispero


Gubidxa Guerrero 

[Texto publicado en Enfoque Diario, el martes 25/Mar/2014]

Se trata de sentido común. No se necesita ser un estudioso versado en temas políticos para saber que la indolencia acarrea males cuantiosos. Quien se muestra apático o permisivo ante delitos flagrantes difícilmente será creído cuando intente sancionar a los infractores.

El gobernador del Estado de Oaxaca, Gabino Cué Monteagudo, ha sido por varios años el principal aliado de la Sección 22 del Sindicato Nacional de los Trabajadores de la Educación (SNTE). A pesar de ser lo más blando con ellos, recibe desdén. Cede en todo y el “magisterio democrático” (que de esto último tiene muy poco) suele despreciarlo como al peor de los priístas.

La tibieza de Gabino con los grupos de presión en el Estado es proverbial. De las declaraciones no pasa. Ante las mafias sindicales agacha la cabeza. Ante los avances del gobierno chiapaneco, lanza declaraciones débiles. ¿Pero qué tal ante movimientos legítimos? Entonces sí cae “con todo el peso de la ley”. Por eso le renunció su Secretario de Gobierno el año pasado.

Tenemos un mandatario de aparador. Sirve únicamente para que no esté vacante el cargo. Ha perdido todo atisbo de autoridad. Duele decirlo, pero así lo constatan millones de ciudadanos que se decepcionan cada vez más.

Este personaje gris, que traicionó las esperanzas de ciudadanos dignos al aliarse con lo peor de la clase política, pretendió dar una muestra de fuerza encarcelando a decenas de vándalos que secuestraron personas en pleno centro de la ciudad de Oaxaca, ante la mirada atónita de la comunidad internacional. Y digo ‘pretendió’, porque nadie creyó ni un segundo que el señor Cué fuera a ser consecuente con su actitud o que fuera a mantener ese temple. A las pocas horas liberó a la mayoría.

A leguas se veía que era un mensaje; un pequeño gesto ante la opinión pública para que no se diga lo que aquí todos sabemos: que en el Estado de Oaxaca no hay gobernabilidad.

Cuando alguien apedrea un avispero sabe que los pequeños insectos saldrán a clavar sus aguijones. Eso exactamente hizo Gabino. Alborotó las avispas sabiendo que éstas le picarían. Lo hizo para asumir él, el costo político de los desmanes en la capital; porque sabe que el avispero ahí seguirá. Sabe que en Oaxaca manda el panal llamado Sección 22.