Detención de Noelle McAffee, presidenta del Departamento de Filosofía de la Universidad de Emory, Atlanta, EEUU |
Una de los capítulos más importantes de la historia contemporánea norteamericana es la movilización estudiantil y popular en contra de la guerra de Vietnam. Hace décadas, miles de jóvenes marcharon y fueron arrestados por la fuerza pública. Las escenas integran el imaginario popular y la cultura estadounidense.
En aquellos años, la ciudadanía exigía que el Ejército de Estados Unidos detuviera una guerra injusta al otro lado del mundo que beneficiaba principalmente a su Complejo Militar Industrial. Si bien las victorias de Ho Chi Min y los guerrilleros vietnamitas fueron estratégicas y contundentes, la movilización de la sociedad civil estadounidense jugó un papel determinante.
Hoy, en varias de las universidades más prestigiosas del mundo, protestan miles de estudiantes y profesores exigiendo el fin del genocidio israelí en contra del pueblo palestino. La respuesta oficial del gobierno del Presidente Joe Biden ha sido la descalificación y la represión policial contra el movimiento que exige, también, que el gobierno estadounidense deje de financiar la maquinaria bélica sionista.
El epicentro fue la Universidad de Columbia. Pero Yale, Harvard y otros centros de educación superior se han sumado. La represión únicamente da más fuerza a la marea. Se dice que pronto se integrarán universidades europeas, como La Sorbona, y de otros países del orbe.