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#LadySaleSale, o el tiro por la culata en tiempos de internet

Gubidxa Guerrero

El miércoles se viralizó en la web un video subido a Twitter por una mujer llamada Gaby Díaz, donde ella misma “denunciaba” la imprudencia del conductor de un camión de carga.

Lo que hubiese sido uno de tantas quejas sociales en contra de los pésimos choferes, terminó generando burlas y descalificaciones hacia la autora del video, grabado con un teléfono celular. Las críticas se emitieron principalmente porque, en lugar de expresar una inconformidad legítima, Gaby Díaz se dedicó a lanzar improperios contra el anónimo señor.

Las reacciones no se hicieron esperar y hasta han puesto apodo a la susodicha: #LadySaleSale. Sucede que entre los interminables insultos, la atractiva señora iba intercalando, como muletilla, la palabra ‘sale’. Hubo quienes contabilizaron más de treinta repeticiones, que la dejaron peor parada que al conductor que supuestamente iba a exhibir.
Resulta condenable, por donde quiera verse, la forma en que la dama agredió verbalmente a su contraparte. Lo insultó usando calificativos denigrantes.

“Nada más para que vean que este pinche fulano, ¡miren!, ¿así o más baboso?”. Con estas palabras comienza la grabación.

Después, agrega: “Ni siquiera pide disculpas el hijo de su pinche madre, ¿sale? Agarra y le pega a mi coche, ¿sale? Ni siquiera fue tan digno, tan decente el señor de disculparse, ni siquiera, ¿sale? No se le rayó, gracias a Dios, mi coche, porque le iba a salir en un pinche ojo de la cara. Si el hijo de su puta madre no tiene para tragar, no creo que iba a poder pagar mi coche, ¿sale? Si no sabes manejar, si no sabes manejar, papacito, ¿sale?, si no sabes manejar, no sé para qué te dan este pinche carrote. Mejor que te den un burro”. 

Los insultos continúan por dos minutos más, y el agredido ni siquiera contestó. Sencillamente, sonreía apenado ante las groserías de la chica. 

En torno a este episodio se generaron distintas opiniones, de las que comparto algunas:

Heraclio Bonilla Gutiérrez, escribió: “Es hija de Carmen Salinas, ¿sale?; es la Corcholatita, ¿sale?; es su primer coche, ¿sale?; ella piensa que trae un coche de lujo, ¿sale?”

Armando Ulisys Ruiz: “Me da pena que digan que sea de Oaxaca. Por personas como ella, luego salen perjudicados muchos de mi bello Estado”.

Fernando Solares, dijo: “Pobre tipa, por querer exhibir a un chofer que ni siquiera le rayó el coche (“porque le habría salido un pinche ojo de la cara”) terminó expuesta al escarnio público. Es la típica clasemediera que se cree de alcurnia. La típica chava humilde que tuvo un golpe de buena fortuna y ascendió de posición. Para renegar de lo que alguna vez fue, pretende humillar a todas las personas que le recuerdan su anterior posición. Lástima de mujer”.

En tiempos de Internet debemos ser cuidadosos con lo que compartimos. Una imagen, un video o un simple comentario pueden generar reacciones inesperadas. Ojalá no sólo Gaby Díaz, sino todos los usuarios de redes sociales, aprendamos la lección.