Recordemos que Siria está respaldada por Rusia, Irán y Hezbolá (movimiento libanés). A Turquía, nominalmente, lo respaldan la OTAN y EE.UU.
Paradójicamente, hace algunos meses, a Recep Tayyip Erdogan, presidente turco, lo iban a derrocar militares coordinados con EE.UU. y probablemente de la OTAN. La inteligencia rusa, iraní y siria previnieron al Ejecutivo turco, lo que fue determinante para su permanencia en el poder.